Estaba cantado: este año hay más uva que nunca. Así lo confirman bodegueros y viticultores, y así lo ratifican en la Denominación de Origen Rías Baixas, donde el pleno celebrado esta misma mañana barajó una estimación de vendimia que eleva la producción prevista hasta los 50 millones de kilos de uva.
Es algo nunca visto antes. Y eso que queda por decidir aún, en un próximo pleno, si se aumenta el rendimiento permitido por hectárea, que está fijado en 12.000 kilos y que, previsiblemente, se mantendrá inalterable.
Ni que decir tiene que 50 millones de kilos de uva es un volumen que, de confirmarse, marcará un récord histórico muy difícil de repetir, pues en años venideros nadie garantiza que vayan a repetirse las óptimas condiciones meteorológicas que se dieron la pasada primavera y en lo que va de verano.
Excelente primavera
Como ya detalló FARO DE VIGO a medida que avanzaba el estado fenológico del viñedo, la excelente floración y el perfecto cuajado posterior garantizan ahora una maduración que dará pie a una cosecha sin precedentes, no solo por volumen, sino también por calidad.
Lejos quedan aquellos 5,4 millones de kilos de uva que se vendimiaban en Rías Baixas en el año 1991, descendiendo hasta los apenas 4 millones de kilos de 1993.

La evolución de Rías Baixas en los últimos años. / FdV
La tendencia al alza es constante en las últimas campañas, con 32 millones de kilos en 2019, 34 millones el año de la pandemia, casi 44 millones en 2021, 41 millones de kilos de uva en 2022, más de 44 millones en 2023 y 42 millones de kilogramos en el pasado ejercicio.
Un 20% más
Entre finales del mes que viene y principios de octubre se recogerá, si nada falla antes o durante la vendimia, un 20% más de uva que en 2024, de ahí esos 50 millones previstos que confirman que «este año hai viño ata nas silveiras».
No es de extrañar que las bodegas busquen personal casi desesperadamente. Necesitan cerrar cuando antes la plantilla con la que van a afrontar esta inminente y abundante vendimia, que comenzará a finales de agosto o principios de septiembre, dependiendo de la zona de producción y el tipo de viñedo.
De ahí que las agencias de trabajo temporal y las oficinas de empleo, como también las propias bodegas de forma directa, estén ofertando miles de puestos de trabajo que esperan cubrir a la mayor brevedad posible.
9 o 10 euros la hora
Las condiciones varían mucho entre unos ofertantes y otros, pero, a grandes rasgos, puede decirse que es el método de trabajo habitual, con un periodo frenético de dos o tres semanas y un salario de entre 9 y 10 euros la hora.
En el caso de la Denominación de Origen Rías Baixas hay que decir que a los más de 5.000 viticultores inscritos, que junto a 179 bodegas explotan una superficie de 4.321 hectáreas –repartidas en más de 22.832 parcelas–, habrá que sumar varios miles de personas más que se ocupen no solo de recoger la uva, sino también de trasladarla y tratarla durante cada fase del proceso de vinificación.
Es decir, que se buscan tanto vendimiadores como tractoristas, carretilleros y otros muchos perfiles.
En la empresa de selección de personal Temporing detallan que «las funciones principales» del proceso de contratación abierto son las de «recolección manual de uva en viñedos, carga de cajas y traslado del producto, mantenimiento y limpieza del área de trabajo».
Para añadir que, en su caso buscan doscientos peones/vendimiadores para trabajar en distintas bodegas de Val do Salnés, con especial significación en localidades como Cambados, Meaño, Ribadumia, Meis y Sanxenxo.
Sin experiencia
Exige a los aspirantes «disponibilidad total durante los días de vendimia y capacidad para realizar trabajo físico al aire libre», sin que sea necesaria experiencia ni coche propio.
Se les ofrece «un contrato temporal que va a depender de la duración de la campaña, con jornada completa según necesidad de cada bodega y salario fijado por convenio», detallan en Temporing .
Asimismo, esta firma brinda la «posibilidad de trabajar en más campañas, rotación entre bodegas, buen ambiente de trabajo y coordinación en grupos».
Terminan explicando que «se organizarán los grupos de trabajo por bodega y se facilitará información previa de punto de encuentro y transporte».
Por su parte, en la empresa Micofer, con sede en la vilagarciana calle de López Cuevillas, buscan «alrededor de 150 o 200 jornaleros» para bodegas asentadas en la comarca de O Salnés.
Las condiciones laborales «van a depender de cada bodega», y en función de la superficie de viñedo a trabajar pueden ofrecerse «contratos de hasta un par de semanas», aclaran en esta firma, encargada de gestionar «una amplia base de datos de trabajadores para lograr la mejor adaptación del profesional al puesto de trabajo que necesite».
En Cambados, Micofer 2000 ETT selecciona personal «con disponibilidad horaria para diferentes turnos, de tarde y noche».
Las principales funciones a realizar son «limpieza de cajas, descarga de cajas, limpieza de las instalaciones y tareas de prensado», valorándose la experiencia previa en bodegas o cargas y descargas.
Tractoristas
Esa misma empresa incluye ofertas como la de «tractorista de campo para importante bodega situada en O Rosal», marcándose como funciones a desempeñar las de «conducción y manejo del tractor, tareas agrícolas manuales como la preparación y mantenimiento del terreno y la revisión de la maquinaria».
Se requiere «habilidad para manejar maquinaria pesada, carné de conducir adecuado, conocimiento del campo y de técnicas agrícolas y disponibilidad horaria».
En Eurofirms, una empresa de selección de personal y trabajo temporal con ocho delegaciones en Galicia, una de ellas en Vilagarcía, dicen trabajar «para importantes bodegas del sector» que les permiten ofertar «alrededor de 400 puestos de trabajo», buena parte de ellos para la subzona productora Val do Salnés».
Desde O Grove, los responsables de la empresa Synergie, multinacional francesa «especializada en la gestión integral de los recursos humanos, trabajo temporal, selección, formación, consultoría y subcontratación», explican que el año pasado movieron «alrededor de 150 puestos para la vendimia, y creemos que este año será una cifra similar».
La ESO
En otras agencias de contratación se aclara que la jornada de trabajo de campo será de 8.30 a 17.30 horas «con parada de una hora para comer».
Junto a las ofertas de estas y otras muchas empresas de contratación están las que aparecen en todo tipo de portales y anuncios en prensa. Una de las que pueden verse en la web busca un centenar de «vendimiadores de campo en la zona de Salvaterra y Condado», con funciones como «corte y recogida de uva y carga y descarga de cajas» y «disponibilidad horaria en campo de 8.30 a 17.30 horas».
En este portal en concreto requieren para cortar y transportar la uva unos «estudios mínimos de Educación Secundaria Obligatoria».

70 personas para recoger 32.000 kilos diarios
Al margen de las empresas de contratación que estos días juegan un papel fundamental para preparar la inminente recolección, hay que citar a otras ya dedicadas a los trabajos en el campo, especializadas tanto en podas como en vendimia.
Es el caso de la firma Docamende, también experta en el abonado de terrenos, parreado de los viñedos, plantación de las nuevas viñas y aplicación de tratamientos fitosanitarios.
Su responsable, Miguel Ángel Piñeiro Docampo, indica que en la próxima vendimia «vamos a ser alrededor de 65 o 70 personas para recoger unos 32.000 kilos diarios en quince días de trabajo, tanto en la zona de Portas como en Ribadumia y Cambados».
Docamende va a desplegar esta labor para una veintena de bodegas que son «clientes fijos que tenemos de un año para otro», y a los que prestan una labor fundamental a partir de «un servicio completamente profesional, con gente especializada en vendimia», e «integral», asumiendo todo el proceso de tratamiento de la uva.
«No podemos trabajar para más bodegas porque con 70 personas no da para más, y tampoco nos planteamos coger más gente porque la logística es complicada», asume el empresario.
Enlace de origen : Rías Baixas espera una cosecha espectacular: 50 millones de kilos