El río Miño ofreció agua en abundancia y en las proximidades al helicóptero que participó en los trabajos de extinción de un incendio forestal declarado a primera hora de la tarde de este domingo en el barrio de Covadonga, en Ourense. Es la primera amenaza del fuego en el entorno de la ciudad, un susto que llega antes incluso de que empiece la estación del verano. En el operativo de emergencias intervinieron, además del helicóptero, dos aviones de carga en tierra, dos agentes, cinco brigadas —incluidos los bomberos municipales de Ourense—, además de dos motobombas. El incendio forestal fue detectado en torno a las 15:40 horas de este domingo y se dio controlado menos de dos horas después, a las 17:25.
Según la primera estimación de superficie de la Consellería do Medio Rural, las llamas afectaron a menos de una hectárea, por lo que técnicamente el incendio fue un conato. Los medios aéreos sobrevolaron el norte de la ciudad a baja altura y el despliegue, la presencia y el olor a humo llamaron la atención en Ourense a la hora de la sobremesa.

El helicóptero de extinción volando a baja altura durante el operativo. / ROI CRUZ
Ocho bomberos del servicio municipal de extinción y salvamento acudieron con tres camiones autobomba al lugar del incendio, en la zona de Montarín, en el entorno de Covadonga. Los profesionales establecieron una primera estrategia defensiva, para evitar que las llamas pudieran amenazar a unas viviendas cercanas. Con la suma de los distintos medios de extinción, tanto en tierra como desde el aire, los bomberos pasaron después a trabajar en el perímetro para cercar el área del fuego y, por último, enfriar la zona interior, para evitar reproducciones.

Bomberos controlando el fuego. / ROI CRUZ
La Policía y los agentes de Medio Rural investigarán las causas, aunque sobre el terreno se apuntaba, como posible origen, a un foco declarado en el entorno de un galpón que almacenaba distinto material y resultó afectado. Desde ese punto de partida las llamas se propagaron al entorno forestal inmediato, un monte arbolado con pinos. Aunque no soplaba el viento que sí agitó por momentos la ciudad el domingo por la mañana, la orografía de pendiente favoreció el incendio de Covadonga.
«El fuego estuvo cerca de viviendas pero en ningún momento existió peligro», afirman los bomberos. En cualquier caso, la Policía Local de Ourense también acudió a la zona y estuvo en alerta por si era necesario tomar medidas de protección para la población.
Enlace de origen : Un incendio que pasó de un galpón al monte, primer susto del verano en Ourense